Qué mejor manera de terminar la semana, que recibiendo una invitación para conocer el magnífico espacio para eventos «Complejo El Olivar» en Alcalá de Henares.
La organización tuvo la amabilidad de preparar un autobús para facilitar el traslado a las instalaciones del complejo.
Una vez allí nos esperaba Gonzalo Marrero. La entrada principal, recibe a los invitados con el mítico portón de forja.
Lo primero que hicimos fue visitar las instalaciones. Como el día era caluroso y el espacio grande, teníamos a nuestra disposición unos cuantos buggies, con los cuales recorrimos los más de 25.000 m2 de jardines y los 60.000 m2 de espacios para todo tipo de eventos: bodas, incentivos, “team buildings”, formación y espacios polivalentes que se adaptan a las necesidades y deseos de sus clientes.
Después del divertidísimo paseo en el que pudimos admirar los cuidados, preciosos y verdes jardines, nos enseñaron la excelente carpa para eventos.
El Olivar posee siete áreas con quince salas funcionales, todas adaptables a las necesidades del evento.
Seguidamente, accedimos a la sala polivalente Forum que dispone de la última tecnología a nuestro alcance. Sala que también se puede adaptar a cualquier necesidad de empresa o evento particular.
En el Salón Forum Gonzalo Marrero nos explicó que este es un negocio familiar fundado en 1975 y que viene de la mano de la tercera generación. Todo empezó con una vaquería que se convirtió en una cafetería, pasando a ser, después de conseguir un gran éxito, un centro/complejo para eventos.
César Bermejo como tercera generación nos explicó que poseen la vocación y el afán de superación, así como encontrar lo mejor para cada evento y que todo resulte siempre perfecto.
Seguidamente conocimos a Francisco de Asís de Limouxine, quien nos habló de esta su empresa de alquiler de coches de lujo con conductor.
Cuando ya conocimos todas las posibilidades de alquiler y facilidades que ofrece esta empresa, nos dirigimos hacia una zona del jardín exclusiva para nosotras en la que pudimos disfrutar de un magnífico cóctel, degustando y apreciando todas las exquisiteces que nos iban ofreciendo y, la verdad, es que estaba todo delicioso.
A continuación y como colofón de esta magnífica experiencia en la que todo fueron atenciones, pudimos participar en un taller de cócteles impartido por José Luis James quien, con paciencia y humor, nos enseñó cómo hacer el mojito y margarita perfectos.
Bueno… bueno… rico estaba, fácil de realizar parecía, pero no lo era. En fin habrá que practicar un poco más…
En definitiva, pasamos una tarde excelente en un lugar único para celebraciones.
Mine Dirim